Para garantizar nuestro compromiso sostenido con los pacientes, profesionales de la salud, consumidores, y también nuestros accionistas, estamos enfocados en mejorar nuestra forma de hacer negocios; operamos bajo los más elevados estándares éticos, promovemos la transparencia en todo lo que hacemos y escuchamos las opiniones de todas las personas involucradas en el proceso de toma de decisiones vinculadas a la salud. En conjunto, trabajamos con un universo que reúne pacientes, profesionales de la salud, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, bajo el convencimiento de que sólo a partir del trabajo colaborativo entre diversos actores podemos abordar seriamente la complejidad de los temas de salud de hoy y mañana.
Nuestro propósito es el de innovar para cambiar la vida de los pacientes. En Pfizer, creemos que las personas merecen vivir mejor y tenemos un compromiso incansable por acercar a los pacientes medicamentos que sean seguros, eficaces y asequibles.
Cada persona es única y tiene el potencial para impactar individualmente y en forma positiva en la salud mundial. La voz de cada una de estas personas nos inspira a desarrollar nuevos medicamentos que cambien sus vidas y a colaborar activamente en la búsqueda de soluciones innovadoras para los grandes desafíos que nos plantea la salud pública del siglo XXI.
En Pfizer, el compromiso por ser un negocio transparente, basado en los valores de la ética y la integridad, es la piedra basal de la forma en la que operamos. Cómo se hacen las cosas es tan importante como el producto o servicio que se ofrece. En nuestro caso, tenemos por delante un enorme desafío: velar por la salud de las personas; y sabemos que sólo es posible lograrlo si tomamos el camino correcto.
Nuestro departamento de Compliance promueve esta cultura de ética e integridad, velando por el cumplimiento de las leyes y políticas de la compañía. Se trata de un departamento transversal, que se involucra con cada una de las áreas ya que, si un eslabón de la cadena no logra sostener este compromiso, el efecto puede impactar a toda la organización.
En este sentido, a través de nuestro programa de Compliance, buscamos promover una cultura de integridad, identificar riesgos de manera proactiva, prevenir el incumplimiento y detectar y responder a potenciales violaciones a las leyes y políticas de Pfizer. Nuestro programa tiene como base una política de puertas abiertas y anti-represalias. El “Tone at the Top” es indispensable para transmitir la importancia de un compromiso real y efectivo con la transparencia.
Pfizer fue fundada en 1849 en Nueva York, Estados Unidos, y llegó a la Argentina en 1956. Desde entonces, trabaja para acercar a los pacientes, innovaciones que cambien sus vidas. Líder en investigación y desarrollo de productos de reconocida calidad y eficacia a nivel global.
1849 – Los primos Charles Pfizer y Charles Erhart, inmigrantes alemanes, instalan una pequeña fábrica química en Brooklyn, Nueva York: Chas. Pfizer & Co. Inc. El primer producto desarrollado fue Santona, un antiparasitario.
1862 – Pfizer se convierte en la compañía pionera en Estados Unidos en la producción de ácido tartárico y crémor tártaro, dos productos muy utilizados en las industrias química y alimentaria de ese país para la elaboración de analgésicos, conservantes y desinfectantes.
1880 – Pfizer comienza a fabricar ácido cítrico, muy utilizado en varias industrias.
1899 – Al llegar a su aniversario número 50, Pfizer cuenta con una amplia gama de productos farmacéuticos e industriales, entre los que se destacan el ácido cítrico, el alcanfor, el crémor tártaro, el bórax y el yodo. Además, ha empezado a exportar su producción a varios países.
1936 – El doctor Richard Pasternack desarrolla un método para producir ácido ascórbico sin necesidad de fermentación de materias primas. Luego de la construcción de una nueva planta que trabajaba las 24 horas, los siete días de la semana, Pfizer se convierte en el líder mundial en la producción de vitamina C.
1941 – Por petición del Gobierno de los Estados Unidos, Pfizer acelera la fabricación de penicilina para tratar a los soldados aliados durante la Segunda Guerra Mundial.
1944 – Partiendo del mismo método de producción del ácido, Pfizer logra producir en masa la penicilina y se convierte en el mayor productor del mundo de esta «droga milagrosa».
1950 – La FDA (Food and Drug Administration en inglés, ente regulador de alimentos y medicamentos de Estados Unidos) aprueba la oxitetraciclina, un antibiótico de amplio espectro, que se convierte en el primer producto que se vende bajo la marca Pfizer.
1952 – Pfizer lanza la División Agricultura, dedicada a ofrecer soluciones de vanguardia a los problemas de salud animal. Un año más tarde, adquiere la compañía especialista en nutrición J.B. Roerig & Co., que se convierte en una nueva división de la empresa.
1955 – Como parte de su expansión internacional, Pfizer inicia operaciones en Bélgica, Brasil, Canadá, Cuba, Inglaterra, Panamá y Puerto Rico.
1960 – La empresa manifiesta su creciente compromiso con la investigación, mediante la creación y consolidación de un laboratorio de investigaciones médicas en Groton, Connecticut.
1967 – Se lanza la doxiciclina, que se convierte en uno de los antibióticos más importantes de la época.
1980 – Piroxicam, un antiinflamatorio, se convierte en uno de los medicamentos de este tipo más vendidos en el mundo y, posteriormente, en el primer producto de Pfizer en alcanzar ventas por mil millones de dólares en Estados Unidos.
1992 – Pfizer lanza tres novedosos medicamentos al mercado: la sertralina, para el tratamiento de la depresión; la amlodipina, para el control de la angina y la hipertensión; y la azitromicina, para el tratamiento de las infecciones respiratorias y cutáneas.
1998 – La empresa amplía el portafolio de productos con la introducción del citrato de sildenafil, un exitoso tratamiento para la disfunción eréctil.
1999 – Pfizer celebra su aniversario número 150 establecida como una de las compañías farmacéuticas más importantes a nivel global. Reconocida por descubrir y desarrollar drogas innovadoras, es destacada por Forbes como Compañía del Año.
2000 – Pfizer y Warner-Lambert se fusionan para formar la nueva Pfizer, la empresa farmacéutica de más rápido crecimiento en el mundo.
2002 – La empresa invierte 5,1 mil millones de dólares en investigación y desarrollo, y lanza voriconazol, un antifúngico administrado por vía oral e intravenosa para el tratamiento de las infecciones fúngicas graves.
2003 – Pfizer y Pharmacia Corporation se fusionan en una sola empresa: se unen dos de las compañías más innovadoras y de más rápido crecimiento en el mundo.
2005 – Pfizer lanza la pregabalina, el primer tratamiento aprobado para el dolor neuropático.
2006 – El portafolio de Pfizer se robustece con el lanzamiento de sunitinib, un nuevo medicamento para el cáncer de riñón avanzado y para tumores del estroma gastrointestinal (GIST).
2009 – Pfizer adquiere Wyeth, y se convierte en la compañía con la más amplia gama de productos del sector farmacéutico.
2011 – La FDA en Estados Unidos otorga la aprobación acelerada de Crizotinib, que fue el primer y, en su momento, único tratamiento aprobado para pacientes con cáncer de pulmón ALK-positivo metastásico.
2012 – La vacuna antineumocócica conjugada de Pfizer es incluida en el Calendario Nacional de Inmunizaciones de Argentina, lo que logra reducir significativamente las tasas de hospitalizaciones y mortalidad por neumonía y meningitis en niños menores de dos años. Pfizer presenta tofacitinib, la primera droga perteneciente a una nueva clase denominada inhibidores de la janus quinasa (JAK), que actúa impidiendo la inflamación. Es el primer medicamento modificador del curso de la artritis reumatoidea que se toma por vía oral.
2015 – Pfizer lanza al mercado global palbociclib, una nueva clase terapéutica que, en combinación con letrozol, demostró que prolonga significativamente la sobrevida libre de progresión en pacientes postmenopáusicas con cáncer de mama RE+/HER2- metastásico.